Veintidós cerdas fueron alimentadas durante la gestación y lactación del segundo y tercer ciclo con dos regímenes alimentarios distintos:
- Dietas convencionales de gestación y lactación (control)
- Dietas bajas en proteína (BP)
Se midió el consumo de oxígeno y la excreción de CO2 mediante cámaras de respiración en circuito abierto, y se calculó la producción de calor por intercambio respiratorio.
En cerdas gestantes la producción de calor está influenciada por el peso de la cerda, el consumo de pienso y la temperatura ambiental (p<0,05). En cerdas en lactación la producción de CO2 estaba afectada por el número de ciclo, el consumo de pienso y el peso de la camada (p<0,05).
Durante la gestación, la producción de CO2 (p<0,04) y de calor (p=0,01) fue menor en las cerdas BP que en el grupo control. La media de producción de CO2 y calor también fue menor en el grupo BP que en el control (p=0,01).
Mediante una alimentación más ajustada en el contenido de PB podemos reducir la producción de CO2 en nuestras granjas. Además, también se reduce la producción de calor lo que indica que la utilización de los nutrientes es más eficiente.
J.K.A. Atakora, D:J. McMillan, S.Möhn y R.R. Ball. Journal of Animal Science 2002. 80 (supl 1):131 Ref 522